A la hora de diseñar nuestro dormitorio debemos tener en cuenta que éste debe ser un espacio para el descanso.
Decantarnos por el color blanco para decorar nuestro dormitorio puede ayudarnos a lograr éste objetivo.
El blanco, aunque algunos lo desconozcan, es la suma de todos los colores.
Tiene una sensación de luminosidad y amplitud que transmite, y da la impresión de frescura, limpieza y pureza.
Por esto mismo se trata de uno de los colores más utilizados en la decoración de interiores, en especial, en los dormitorios.
Genera calidez y frescura al mismo tiempo.
Hace los espacios más amplios.
Hace los ambientes más luminosos.
Genera una sensación de limpieza.
Crea estancias muy elegantes.
Combina con todo:
Lo mejor del blanco es que combina con cualquier color: pasteles, vivos, otros neutros, negro... Y no sólo eso, el color blanco combina con cualquier estilo: minimalista, vanguardista, vintage, ecléctico, clásico, clásico renovado... Tú eliges la combinaciones.
El color blanco es un color que fomenta la creatividad, permitiéndonos crear rincones únicos, relajantes y visualmente atractivos.